sábado, 30 de marzo de 2013

Árboles

Desde hace unos años he sentido el impulso, casi obsesivo de fotografiar árboles. Tengo una curiosa y querida colección de árboles de diferentes países: Senegal, Finlandia, Nicaragua y España. Esta mañana al releer un capítulo de mi libro estrella: Mujeres que corren con lobos, me llevé una grata sorpresa, pues la autora me daba una respuesta a esta necesidad. Os paso a transcribir el contenido de parte de este capítulo: " El árbol es el símbolo arquetípico de la individuación; se considera inmortal, pues sus semillas siguen viviendo, su sistema de raíces ofrece cobijo y revitaliza y es la sede de toda una cadena alimentaria de vida. Como la mujer un árbol tiene también sus estaciones y sus fases de desarrollo; tiene invierno y primavera. Tenemos por tanto un árbol que simboliza la abundancia de la naturaleza libre y salvaje de la psique de una mujer, pese a lo cual la psique no comprende su valor. Cuando hablamos de la vida de una mujer en relación con el símbolo del árbol, nos referimos a la desbordante energía femenina que nos es propia y que se manifiesta de manera cíclica a modo de mareas que suben y bajan con regularidad. Sin la renovación de este floreciente impulso en nuestras vidas, la esperanza queda sepultada y no se remueve la tierra de nuestra mente y nuestro corazón...... "